Voluntariado ecológico en Uruguay- Bioconstrucción
Durante nuestros días de viaje por Uruguay nos animamos a realizar un voluntariado sobre un proyecto ecológico en Barker, Colonia del Sacramento, Uruguay. Y cabe decir, que “nos animamos” porque este país es el más caro de Sudamérica, así que queríamos ahorrar un poco. Pero no sólo ahorramos unos cuantos dólares, sino que conocimos verdaderos amigos.
Nuestros Anfitriones
Nuestros anfitriones fueron generosísimos, se trata de una pareja joven que está construyendo una casa ecológica, muy sustentable con el medio ambiente, y buscan encontrar la autosuficiencia alimenticia. Tienen 3 lindos perritas, que fueron rescatados de las calles y las llaman “Las Pipis”.
Ellos son técnicos en industrias lácteas y tienen un negocio familiar de producción y venta de quesos, así que esto fue un plus, porque además del aprendizaje de la bioconstrucción, durante nuestra convivencia aprendimos in situ sobre procesos lácteos, por ejemplo, aprendimos a preparar yogur casero.
Nuestros anfitriones hablan español y portugués; y ya tienen mucha experiencia recibiendo voluntarios de muchos lados del mundo.
Nuestra estadía:
Nosotros optamos por voluntariar por 1 semana. Yo te recomiendo quedarte un poco más. ¡Créeme que vale la pena! La casa es sencilla, limpia y organizada. La zona es muy segura y tranquila. Y el aprendizaje, no tiene límite.
Nuestro voluntariado:
Nuestro trabajo consistió en ayudar 5 horas diarias por 04 días a la semana. Nuestra rutina empezaba muy temprano, desde las 7 am, y antes del mediodía ya estábamos libres. La tarea principal fue ayudar en el proyecto de bioconstrucción, preparar la mezcla, pulir las paredes, colocar cerámica al piso y organizar el área de trabajo. También tuvimos la suerte de ayudar a un amigo del anfitrión en la construcción de una casa con techo vivo.
Las demás tareas dentro de la casa se basaban en mantener el lugar limpio, cocinar si fuese el caso y lavar la loza.
¿Qué aprendimos?
Aprendimos mucho sobre la bioconstrucción, y cómo aprovechar los recursos naturales de forma consciente. Trabajamos con agua, arena, paja y barro para crear una mezcla sólida para el relleno de las paredes.
Entre otras prácticas medioambientales que aprendimos: la importancia de contar con un espacio para el compostaje y construir un biodigestor.
¿Qué recibimos gratis?
Recojo gratis
Los anfitriones nos recogieron y nos llevaron hasta la casa. Nos instalamos en el jardín y nos proporcionaron una carpa muy amplia. Fue muy cómodo.
3 comidas diarias
Todas las comidas incluidas, y muy buenas comidas. Los anfitriones comían muy saludable en el desayuno, teníamos la opción de frutas, yogur natural, avena, pan local, mermeladas caseras y quesos. A ellos les gusta cocinar mucho y siempre nos deleitaba con algún plato típico del país. Los almuerzos y cenas eran muy variados y quedamos más que satisfechos.
Paseos gratis
Nuestros anfitriones nos llevaron a pasear por la zona, conocimos varios puntos turísticos como Rosario, Nueva Helvecia, Santa Ana y Juan Lacaze. También nos invitaron a probar torta frita, un pastel popular en Uruguay. También, conocimos la Escuela Superior de Lechería de Colonia Suiza, como dato, nos contaron que esta institución posicionó al país como pioneros en la producción de leche de América Latina.
Lo más bonito fue que nos invitaron al carnaval de Colonia del Sacramento, uno de los eventos más importantes de la ciudad. Nuestro anfitrión forma parte de la banda de candomblé Alma Lubola, un estilo de música de raíces africanas. Tuvimos la oportunidad de ir a los ensayos de la banda, y, además, verlos en su presentación en el día central del carnaval. Aquel día se presentaron casi 10 bandas locales. El desfile fue toda una experiencia cultural.
También nos llevaron a la casa granja de sus padres, un lugar muy bonito, donde pudimos ver más de cerca el proceso de producción de quesos artesanales. Rescato esta experiencia porque fue un acercamiento muy positivo con la gente local y sus costumbres.
¿Cuánto gastamos?
Muy poco, el costo de vida en Uruguay es muy alto, pero nosotros ahorramos 1 semana de hospedaje, más 3 comidas diarias y tours gratis. Sólo pagamos el bus para llegar desde Colonia del Sacramento hasta Radal Juan Lacaze ($6UDS) y un chivito canadiense ($14USD), que se nos antojó comprar durante el carnaval, es decir, durante 7 días solo gastamos: $20 dólares americanos.
Si te interesa este voluntariado los puedes contactar a través de su Instagram o a través de la plataforma de Worldpackers (usando nuestro código promocional losviajesdejemely tendrás $10 dólares de descuento para tu inscripción). Si quieres aprender más sobre voluntariados, te invito a leer este post.
¡Vuelve pronto al blog!
